El reglamento de 1852. en su articulo 3º, establecía que eran establecimientos municipales: <<los destinados a socorrer a enfermedades accidentales, a conducir a los establecimientos generales o provisionales a los pobres de sus respectivas pertenencias y a proporcionar a los menesterosos, en el hogar domestico, los alivios que reclamen sus dolencias o una pobreza inculpable. A esta clase pertenecen las casas de refugio y hospitalidad pasajera, y la beneficencia domiciliaria>> (1). Apoyándose en dicha ley una serie de hechos frecuentes en la capital hispalense pedía la necesidad de fundar en ella las Casas de socorro donde se atenderían a las victimas de accidentes de carácter urgente ya que por la considerable distancia que estaban ubicado los hospitales en caso de gravedad se perdía un tiempo precioso para ser atendido por un facultativo. La atención a pacientes que presentaba lesiones leves, se evitaba que degeneraran en cuadros mas graves por haberse prolongado la atención requerida y el transporte (camillas) a centros hospitalarios en caso de que mostrasen una patología grave.
Ante esta situación se creo una comisión a nivel municipal que propusieron, la creación de dos Casas de Socorro en Sevilla. Estos establecimientos se ubicarían uno en Triana y otro en el Asilo de Mendicidad de San Fernando.
Esta comisión mostraba la conveniencia de que los departamentos fueran dispuesto con la separación de sexos, lesionados y enfermos. Para atender a la Casa de socorro de Triana se pedía que se invitaran a los cuatros facultativos de aquel barrio con el fin de turnarse. También proponía que cada casa tuviera un practicante a quien nombrarían por oposición ante el tribunal que designara la Academia de Medicina y Cirugía. El Ayuntamiento aceptó la propuesta de la comisión.
Durante los meses de marzo y abril de 1864 se asistieron a 34 individuos en la casa de Socorro de Triana que estaba ubicada en una casa particular arrendada en la calle Larga, hoy Pureza. En el mes de diciembre de 1864 se atendió según informe del Ayuntamiento en la casa de Triana a 17 personas heridas de diversa consideración, 6 contusiones y fractura 1. El distrito diez de Triana, compuesto por las Parroquias de Santa Ana y la O, (en esa fecha Sevilla estaba compuesta por diez distritos), asignaron al medico D. Francisco Cifuentes, interino, durante la ausencia del titular D. Manuel García Montalván y la botica a D. José Palacios. A.M.S.
A partir del 20 de agosto de 1870, las Casas de socorro se regirían por un reglamento orgánico, que tenían por objeto, como prioridad, la prestación de los primeros auxilios a toda persona de haber sufrido un accidente en la vía publica; segunda, la cura por primera vez intención de las heridas; tercera, la asistencia en la enfermería de aquellos lesionados que por su gravedad no podían ser trasladados al hospital o a sus casas después de socorridos: cuarta, la primera visita facultativa en el domicilio de cualquier ciudadano en casos urgentes y por ultimo el servicio de consulta publica diaria para pobres, facilitar las camillas para enfermos o heridos y administración de vacunas.
Como muestra de asistencia medica primaria, relato un parte de incidencia de una niña atropellada en la calle Pagés del Corro (A. B. C; miércoles 30 de enero 1957) llamada Petronila Moreno Rivera de nueve años de edad, con domicilio en la misma calle en el numero 18, que fue atropellada por el motorista A. P. P con domicilio en Los Remedios. Conducida a la Casa de socorro de Triana, recibió cura de urgencia por el doctor Perea y el practicante señor Conradi. Le fue apreciada contusiones y erosiones en varias parte del cuerpo y una contusión con gran hematoma en la región frontal maceterina izquierda, de pronostico reservado.
Parece que el accidente se produjo cuando la pequeña inesperadamente, intento cruzar la calle, al ser llamada desde la acera opuesta por una amiga.
La Casa de socorro de Triana se traslada a la calle San Jacinto, al nuevo edificio de D. Aurelio Gómez Millan 1928-29 (según planos) donde se asienta hasta el 24 de diciembre de 1988, día que se efectuaría su cierre, quedando convertidas en un mero servicios de distritos.
El cierre de las casas de socorro suponía la eliminación de una barrera sanitaria que aliviaba las urgencias de los hospitales.
Manuel Mediano Vargas.
Triana verano 2014
Fuentes: María del Carmen Giménez Muñoz. La beneficencia municipal en la capital hispalense. (1850-1900). A B C. Hemeroteca. Foto Julio Beauchy Perou.
Nota de B.T.- Esta "baranda", tiene el honor de dar lugar en ella a uno de los edificios más sobresalientes del barrio de la mano del colaborador-redactor; Manuel Mediano. Una fachada en la cual figuraba el escudo de la ciudad de Sevilla, que resaltaba en un bajo relieve de la misma, esta se construyó de ladrillo y destacando en ella las ventanas, puertas y pilastras.
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